Quizás algunos de nuestros lectores se han deleitado con la comida típica del restaurante «Don Jediondo, Sopitas y Parrilla». Pues lamentablemente el negocio gastronómico del humorista Boyacense no pudo honrar los compromisos adquiridos dentro del proceso de recuperación al que se había sometido ante la Superintendencia de Sociedades (SIS), circunstancia que obligó a la SIS a la declaratoria de incumplimiento del acuerdo de reorganización empresarial y la consecuente orden de liquidación judicial. ¿Qué significa todo esto? «Don Jediondo, Sopitas y Parrilla S.A.S.» se había acogido al proceso de reorganización empresarial previsto en la Ley 1116 del año 2011, su propósito es lograr un acuerdo con los acreedores para evitar que la compañía, y por lo mismo los restaurantes, desaparezcan. A pesar de los esfuerzos para el cumplimiento del acuerdo, es decir el pago de las deudas de forma gradual, algunas no pudieron ser satisfechas, evento que obliga a que la compañía sea liquidada. El valor de los activos que reportó «Don Jediondo, Sopitas y Parrilla S.A.S.» es casi igual al valor de los pasivos, significa que la compañía está realmente quebrada. ¿Qué sigue? La SIS deberá congelar todo el patrimonio actual de la compañía para salvaguardar los derechos de los acreedores y con él procederá al pago de las deudas, según el orden legal que corresponda, (prelación de créditos), y hasta que el capital lo permita, luego de ello se declarará liquidada y por lo tanto extinguida la compañía y sus establecimientos de comercio, (restaurantes).
Por: Giovanni Andrés Bernal Salamanca
___________________________________________
Presidente
¡Nuestro compromiso, proteger tus derechos!